Para definir mejor este término podemos considerar la definición de Raymond L. Magnelli y Mark M. Klein en el libro, "The Reengineering Handbook" donde señalan: Un proceso es una secuencia de actividades que convierte los recursos en productos o servicios.

Recordemos que existen procesos por medio de los cuales mi organización tendrá que ofrecer sus servicios. Lo que interesa es cómo voy a realizar mi trabajo. -

Actividades con valor agregado

Este tipo de procesos son los que crean el producto y nos ayudan a darle un mayor valor.

Actividades de carácter de laisse fair.

Son las que se realizan entre los distintos departamentos de la organización y que pasan sobre barreras de orden jerárquico para poder obtener un producto final. -

Actividades de control.

Son aquellas que fueron creadas para medir metodológicamente las actividades de una organización. Un punto interesante por destacar es el hecho de que, si nosotros nos preocupamos primero por satisfacer al cliente, cualquiera que este sea, diseñaremos procesos que justamente apunten a lograr ese cometido. Esto se consigue al diseñar diferentes procesos para cada organización, ya que todas las organizaciones son distintas y tienen sus propios clientes, necesidades y características.

Lo importante es que cualquiera que sea el diseño, este funcione realmente. Por otro lado, la identificación de nuestro cliente este puede variar, pues éste puede ser desde la persona que va a una panadería a comprar el pan como toda la ciudadanía que necesita buenos servicios públicos. Iniciar este documento con el tema del ser humano, no es sólo significativo en el orden metodológico del trabajo, sino que representa uno de los aspectos en los cuales debemos preocuparnos más en cualquier tipo de organización, ya sea esta una corporación grande o un PYME (pequeñas y medianas empresas).

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